Esa humedad incómoda, recurrente, que no te da calidad de vida ¿por qué sucede?
Hay muchos tipos de secreciones vaginales. Lo importante es saber cual es fisiológico y cual no. Al decir fisiológica me refiero a aquella que tiene que ver con el funcionamiento de nuestro cuerpo. La vagina es una cavidad virtual, es húmeda por excelencia, elástica, y es normal la presencia de secreciónes en ella. Algunas tienen que ver con nuestra ovulación, otras con el momento del ciclo en el que estamos, otras con la edad que manejamos. Pero a veces nos comparamos. ¿Por qué hay mujeres que dicen sufrir de flujos vaginales y otras no? Sí, eso es cierto hay mujeres más húmedas que otras y esto depende del funcionamiento de cada organismo. Un flujo fisiológico debe ser inodoro, no causar ardor, dolor o prurito, no abundante a no ser que se esté embarazada. Si hay cambios diferentes consulta tu médico.
Es posible hacer una recanalización tubárica. Cirugía que consiste en reversar la desconexión y volver a unir las trompas y reanudar la fertilidad. En algunos casos es prudente hacer una revisión previa por vía laparoscópica para saber el pronóstico y observar con que cantidad de trompa se puede trabajar. Es bueno aclarar que independientemente hayan realizado ligadura de trompas o corte de las mismas el procedimiento de recanalización es el mismo. Este tipo de cirugía suele ser ambulatoria y el estricto cuidado es de aproximadamente una semana.
Una segunda opción es hacer fertilización in vitro con la cual no se necesitan las trompas de falopio ya que la unión óvulo y espermatozoide se realiza en un laboratorio para posteriormente ser implantado en tu útero y dar inicio a la gestación.
Es importante que consultes a tiempo ya que hay una edad límite para tu fertilidad y para el desarrollo de éste tipo de cirugías.
¿Qué es?
Es un procedimiento ambulatorio corto que no genera incapacidad y consiste en ver el cuello del útero con un microscopio de gran aumento que permite ver imágenes que a simple vista no se pueden ver.
Cuando se aprecian imágenes anormales o que reaccionan diferente con unas sustancias llamadas reactivos. Se le toma una biopsia en sitio específico. Es decir, nos ayuda a localizar la lesión, por lo tanto aumenta su sensibilidad. Es el procedimiento idóneo para la detección del Virus de Papiloma Humano y saber en qué estado está la enfermedad para así definir el tipo de tratamiento que se va a escoger.
¿En qué casos se hace?
- Cuello macroscópicamente anormal con presencia de úlceras, erosiones, presencia de tumoraciones.
- Sangrado repetitivo con la relación sexual
- Citología inflamatoria en repetidas oportunidades
- Citología anormal
- Antecedente de VPH previo o haber estado en contacto con una pareja positiva para VPH. Presencia de alguna otra enfermedad de transmisión sexual
- Presencia de verrugas en vulva, entre otros.
Si eres portadora de algunos de estos síntomas o signos debes consultar.
La Citología es un método de tamizaje general para detectar cáncer de cuello uterino.
Nos puede dar un preaviso, una alarma o nos puede enviar directamente a un diagnóstico.
¿Cuál es el Preaviso?
Aquellas citologías persistentemente inflamatorias.
¡Cuidado! Esto no es normal y mucho menos aún si has recibido tratamientos médicos para aliviar la infección, como óvulos, antiinflamatorios o cremas vaginales.
Detrás de estas citologías inflamatorias persistentes puede estar una infección por virus de papiloma humano.
Es cuando se amerita entonces hacer estudios más profundos para llegar a un diagnóstico. Por ejemplo una Colposcopia.
No te quedes con el diagnóstico, siempre hay una solución.
*¿Qué debes tener en cuenta en tu
alimentación durante tu embarazo?
*¿Con qué peso inicias?
*La alimentación debe ser dirigida de acuerdo al trimestre en que te encuentres.
Primer trimestre: hay mucha inapetencia, náuseas y vómitos. No te intranquilices si tienes una baja de peso, ya que en el primer trimestre puede ser normal por los síntomas propios de la gestación. Si no has tenido náuseas procura tomar alimentos formadores que son aquellos que tienen PROTEÍNAS, carnes, frijoles, huevo, quesos asociado a algunas harinas enteras como yuca, harina de maíz.
Segundo trimestre: desaparecen las náuseas y tienes más libertad para ingerir alimentos. Tus comidas deben ser fraccionadas, es decir varias veces al día en pocas cantidades. Tus meriendas deben ser a media mañana y media tarde y deben ser alimentos como Yogurt bajo en calorías, frutas como manzana, pera, papaya, durazno. Consumir poco Mango, níspero o banano.
Tercer trimestre: Ten cuidado con las harinas, dulces, exceso de sal, postres, pastas, arroz en exceso. En esta etapa debes cuidar especialmente tu peso.
Un aumento excesivo de peso en poco tiempo puede asociarse a una preeclampsia, intolerancia a carbohidratos, macrosomía (feto grande), exceso de líquido amniótico y otras complicaciones.
Recuerda que sólo debes subir entre un kilo y 1.5 kilos cada mes, depende de tu peso previo.
Durante toda la gestación debes consumir alimentos que contengan omega 3 y omega 6 ácidos grasos presentes en pescado como atún y salmón, aceite de oliva, aceite de linaza. Estos ayudan a prevenir preeclampsia y al desarrollo cerebral de tú bebé.
Estas son recomendaciones básicas muy importantes pero si inicias tu embarazo con sobrepeso debes ponerte en manos de un nutriólogo que te oriente más específicamente a tener una ganancia adecuada de peso.
Recuerda que tu salud está en tus manos.
La gestación es una etapa muy importante en tu vida, en la que debes prepararte con tu nutrición, para suplir necesidades del bebé y prevención de complicaciones maternas.
¿Sabías que el aumento excesivo de peso en la gestación es un factor desencadentane de preeclampsia?
Estadísticamente subir mas de 2 kg por mes puede conllevar a esta mortal enfermedad, es por esto necesario conocer en que se basa la nutrición.
Desde el primer trimestre debes consumir pescado dos o tres veces a la semana, especialmente atún y salmon para el suministro de omega 3 y omega 6 al organismo, como también la ingesta de calcio a partir de la semana 15, a razón de 2 cápsulas al día.
Estos micronutrientes, asociados a ingesta poco calórica, es decir escasos carbohidratos, te darán mecanismos de defensas para evitar una preeclampsia. Sin embargo debes tener en cuenta que esto no es absoluto pues hay otros factores de riesgo como raza, obesidad, presencia de diabetes, etc que deben considerarse.